En un parpadeo puedo oler tu sinceridad,
tus manos me han enseñado a escuchar.
Fue tan difícil aprender, que ahora tengo la piel llena de llagas.
Con el ritmo de las estrellas pasa la noche,
todo se ha abandonado
pero renace la pasión de entre tu pecho.
Te siento cerca.
Puedo escuchar como mis caderas te alientan a venir a mi,
mi muslo me avisa que has llegado
La piel se me enchina al sentir tus labios.
Me inclino hacia ti, quiero besarte.
Coqueteo con mi cabello entre tus manos.
Escurridizos como las sombras,
nos movemos para entonar una melodía nueva,
Un sonido de coqueteo y libre movimiento
Un sonido que nos lleva a desear que mañana ya sea de noche.
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